Y de repente te topas con uno de esos días, después de que todo estaba bien en donde las cosas ya no lo están tanto…
Claro, supongo que cuando todo gira alrededor tuyo todo está bien porque no te das cuenta de la realidad. Despierta, el mundo no eres tú, el mundo sigue ahí y es real, si lo olvidas no deja de existir.
Que cruel es despertar y despertar porque te has dado cuenta que la regaste, que dejaste de estar ahí para los que te necesitan, que no eres aquella buena persona que los demás pensaban, dejaste de ser aquel buen amigo con el cual los demás podían contar.
Que cruel es despertar sabiendo que pudiste haber hecho más. Que cruel, saber que puedes hacer más y no lo haces.
Que cruel es despertar y darte cuenta que en lugar de dar las gracias hiciste más daño que bien; a pesar del bien que recibiste.
Y ahora me pregunto, ¿por qué?
¿Por qué he dejado que yo misma llegue hasta ese punto? ¿por qué siempre todo ha de ser alrededor de mi? ¿por qué dar por garantizados a mis amigos? ¿por qué olvidar que para que crezca una planta hace falta cuidarla un poco todos los días? ¿por qué de repente desperté y me dí cuenta de lo que estaba haciendo o no haciendo no estaba bien, por qué hasta ese momento? ¿por qué a veces me tardo tanto en ver la realidad?
Carajo, que difícil es ser…
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